Roman Abramovich, multimillonario ruso, puso en venta esta semana la totalidad de las acciones del Chelsea FC, uno de los equipos más importantes de la Liga Premier de fútbol profesional de Inglaterra.
La decisión del magnante, de 55 años, se debe a presiones externas de fanáticos y algunos empresarios de la nación británica que aseguraron que guarda una relación de amistad con Vladímir Putin, presidente de Rusia que fue criticado por la opinión pública mundial tras ordenar una invasión militar a Ucrania sin justificación.
Abramovich exigirá 2.000 millones de dólares por un cuadro Blue, que disputa sus duelos como anfitrión en Stamford Bridge y que adquirió en 2003.
Los logros de Abramovich
Con Abramovich como jefe de la junta directiva, Chelsea FC logró sus dos primeros trofeos de la Liga de Campeones de la UEFA, el torneo más importante de Europa. Se consagró cinco veces en la Liga Premier y obtuvo el Mundial de Clubes de la FIFA. Se coronó en un par de ocasiones en la Liga Europa de la UEFA.
Fueron 18 los gallardetes que cosechó el elenco londinense gracias a la inyección de dinero de este hombre que se hizo multimillonario con inversiones en el mercado petrolero. Antes de su llegada, Chelsea FC sólo tenía un cetro de liga logrado en 1955.
Aseguró que Chelsea FC es su pasión y por eso decidió adquirirlo, pero ahora mismo no desea que la tensión política entre Rusia y Ucrania, así como las constantes críticas de sus adversarios que comentaron que «pertenece al círculo de poder de Putin» genere distracciones en los futbolistas.
Palabras del magnate
“Espero poder visitar Stamford Bridge por última vez para despedirme de todos ustedes, los fanáticos del Chelsea FC, en persona. Ha sido el privilegio ser parte del Chelsea FC y estoy orgulloso de todos nuestros logros conjuntos. El Chelsea FC y sus seguidores siempre estarán en mi corazón”, dijo Abramovich el viernes a Rob Harris, periodista de la agencia de noticias AP.
Indicó que en 19 años como propietario invirtió 2.000 millones de dólares en fichajes para que la tropa de Londres se transformara en una de las mejores del viejo continente, algo de lo que jamás se arrepentirá.
“No pediré que se pague ningún préstamo. Esto nunca ha sido por negocios ni por dinero para mí, sino por pura pasión por el juego y el club”, agregó el propietario de Chelsea FC que prometió usar el dinero de la venta de la oncena en acciones altruistas.
“He dado instrucciones para que se establezca una fundación benéfica a la que se donarán todas las ganancias netas de la venta. La institución será en beneficio de todas las víctimas de la guerra en Ucrania, así como a personas en extrema pobreza”.
Escrito por: Joseph Ñambre
Foto: Prensa Chelsea FC